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Auge sectario con el beneficio de una pandemia

 


A raíz de la situación actual que ha asolado el planeta y los problemas sociopolíticos que están día a día mermando la sociedad habiendo un resurgimiento sectario que se ha multiplicado significativamente.

En estos dos últimos años, con todo lo que ha sucedido a nivel mundial, ha habido un resurgimiento de las sectas (ya sean políticas, económicas, sexuales o de cualquier ámbito) que han aprovechado este momento de "debilidad" para arraigarse dentro de la sociedad. Claro ejemplo de ello, a nivel nacional, ha sido el principal caso que ha puesto en alerta a la población castellonense de Vistabella de Maestrazgo con una secta que se ha desmantelado hace pocos días donde se realizaban abusos sexuales de menores e, incluso, se teoriza con tráfico de estupefacientes. 

De ese mismo modo, y aprovechando la tragedia que asoló a la isla de la Palma con la erupción del volcán, se han acercado algunos "voluntarios" camuflados de activistas de una ONG donde están intentando una captación de adeptos activa para la famosa "Cienciología", fundada por L. Ron Hubbard en los Estados Unidos. 

Obviamente, con el problema de la COVID-19, el aumento de sectas de nivel curativo o esotéricas ha sido disparada a unos niveles estratosféricos, según Luis Santamaría, dónde expone que "se ha multiplicado la captación online con discursos de negacionismo ante la pandemia, arraigándose y asentándose muchísimo en la sociedad actual".

¿Qué opinan sobre esto? ¿Qué les parece esta práctica creciente a nivel nacional e internacional? ¿Creen que existe alguna secta nueva insular de carácter destructivo? 


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